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martes, 31 de mayo de 2011

El Jazz del Diablo (cap 5)

El Jazz del Diablo.
 Capitulo 5: El Animas Devoratrix



El dolor de tocer sangre no es algo nuevo en las mananas de Nikolai, pero es algo a lo cual nunca se acostumbrara. La desesperacion de sentir como tu cuerpo muere y no poder hacer nada para impedirlo es algo que nunca nadie comprendera a menos de que lo viva en carne propia.
Nikolai en las últimas mananas despierta tociendo con gran dolor, para posteriormente escupir sangre sobre sus sabanas limpias; es algo inevitable, la tos no le da tiempo suficiente como para salir de la cama. 

Nikolai a sus 30 inviernos sabe perfectamente que no le queda mucho antes de despedirse del mundo carnal. Su cuerpo se ve ya debilitado por el dificil modo de vida de un Animas Devoratrix. Una vida llena de heridas fisicas y psicologicas sin presedente alguno.

Los Animas Devoratrix o tambien llamados Deboradores de Almas, son personas sin famila, sin amigos, sin relaciones. Son personas que solo viven para cumplir su deber para la Santa Iglesia, limpiar el mundo de cualquier demonio que atque a las almas inocentes. Entrenados desde ninos hasta su madurez, los deboradores de almas son educados para no temer a la muerte, a dar su vida por los demas y nunca cometer el error de divulgar el secreto de su existencia.

Nikolai tras terminar de toser limpia su boca con las sabanas y observa su reflejo en la ventana que tiene justo delante de el. Los Animas Devoratrix tienen una condicion fisica formidable, es necesaria para su labor, de eso no cabe duda; pelear contra un demonio no es tarea sencilla y mucho menos devorar su alma.

En la mente de Nikolai no sale el recuerdo del demonio que acababa de devorar unas horas atrás. Un poderoso demonio con forma de bestia, sin duda alguna uno de los más peligrosos que se pueda encontrar cualquier ser vivo.

Con suabidad recorre con sus dedos la gran cantidad de tatuajes que tiene en su brazo derecho. Un simbolo del signo zodiacal Aries sobresale de todos los demas. La Santa Iglesia tiene un ejercito de Animas Devoratrix por todo el mundo, todos ellos estan divididos en 12 grupos; cada grupo representa un signo zodiacal.
Exahala un largo suspiro mientras que mira a su habitacion llena de periodicos donde busca mensajes encriptados; las heridas de la noche anterior todavia no han sanado de su cuerpo, por simple milagro logro sobrevivir a las garras de aquella vestia.
El celular holografico de Nikolai inicia a sonar, aquel ruido retumba en la cabeza adolorida de aquel hombre con mucho dolor. Con furia se levanta de su cama con su cuerpo completamente desnudo -en su piel se logran apreciar gran cantidad de cicatrices la mayoria ahora son simples marcas-, con fuerza toma su celular y responde a la llamada; de la pantalla se extiende una imagen tridimencional de un sacerdote.

       -Buenas dias Nikolai. – Saluda el padre Romulus.
       -Buenos dias… - Responde con disgusto.
        -La mision que realizaste la noche de ayer resulto ser todo un éxito, solo que varias personas te vieron usar el poder de tu brazo… sabras lo que eso significa. –
       -Si, asesinaron a los…-
       -¡Silenciamos! – Corrigue el padre. – Los silenciamos Nikolai, la Santa Iglesia no comete asesinatos.
       -Si como diga… - Refunfunea Nikolai mientras que toma un trago de alcohol. – Bueno, comprendo que tuvieron que silenciar a los testigos y me siento mal por eso… No se volvera a repetir.
Sin dejar que el padre respondiera apaga su celular.

A Nikolai no le queda del todo claro los sucesos de la noche anterior, su cabeza es un desorden de ideas y escenas que no tienen sentido para el. Con fuerza se tira sobre su sillon de piel y se recuesta para tratar de aclarar sus ideas.

      -Solo recuerdo esas garras… esos dientes, y su risa; una despiadada risa.
El cansancio se apodera del cuerpo de Nikolai que se queda nuevamente dormido.

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